La mayoría de las personas que trabajamos frente a un ordenador estamos acostumbrados a estar una media de 6 u 8 horas diarias sentados, algo que podría considerarse un auténtico crimen contra la circulación sanguínea de nuestro cuerpo.
Sin embargo, estar en la oficina no tiene que limitarte a la hora de hacer el máximo ejerciciodentro de las posibilidades, que a decir verdad no son muchas. En el siguiente artículo te dejamos algunas buenas ideas: adáptalas a tu día a día y notarás el cambio incluso en tu estado de ánimo.
1. Levántate un poco antes y aprovecha para hacer ejercicio de camino al trabajo. No hace falta que hagas un gran esfuerzo: solo aprovecha para ir caminando un tramo del camino, ve en bicicleta o acelera el paso para llegar a la oficina.
2. Una vez dentro, aprovecha esos momentos en los que te levantas para ir al baño para realizar algunos ejercicios rápidos que ayuden a reactivar la circulación y hacer trabajar un poco a los músculos. También puedes hacer estiramientos para la espalda, el cuello o las piernas.
3. Cada vez que debas trasladarte de una planta a otra hazlo caminando y no tomes nunca el ascensor. En caso de que haya demasiados pisos puedes subir algunos en ascensor y bajarte algunas plantas antes para subir tu destino caminando.
4. Aprovecha los momentos de descanso para desconectar mientras estimulas la circulación: por poco tiempo que tengas sal a la calle a dar un paseo después de comer para darte un respiro y activar tu cuerpo.
Sabemos que tras la jornada laboral tienes muchas otras cosas que hacer cada día, pero aún así debemos recomendarte que recuperes el tiempo perdido dedicando al menos 20 o 30 minutos a realizar ejercicio para reactivar la circulación y a mantener tu cuerpo en forma.
Sin embargo, estar en la oficina no tiene que limitarte a la hora de hacer el máximo ejerciciodentro de las posibilidades, que a decir verdad no son muchas. En el siguiente artículo te dejamos algunas buenas ideas: adáptalas a tu día a día y notarás el cambio incluso en tu estado de ánimo.
1. Levántate un poco antes y aprovecha para hacer ejercicio de camino al trabajo. No hace falta que hagas un gran esfuerzo: solo aprovecha para ir caminando un tramo del camino, ve en bicicleta o acelera el paso para llegar a la oficina.
2. Una vez dentro, aprovecha esos momentos en los que te levantas para ir al baño para realizar algunos ejercicios rápidos que ayuden a reactivar la circulación y hacer trabajar un poco a los músculos. También puedes hacer estiramientos para la espalda, el cuello o las piernas.
3. Cada vez que debas trasladarte de una planta a otra hazlo caminando y no tomes nunca el ascensor. En caso de que haya demasiados pisos puedes subir algunos en ascensor y bajarte algunas plantas antes para subir tu destino caminando.
4. Aprovecha los momentos de descanso para desconectar mientras estimulas la circulación: por poco tiempo que tengas sal a la calle a dar un paseo después de comer para darte un respiro y activar tu cuerpo.
Sabemos que tras la jornada laboral tienes muchas otras cosas que hacer cada día, pero aún así debemos recomendarte que recuperes el tiempo perdido dedicando al menos 20 o 30 minutos a realizar ejercicio para reactivar la circulación y a mantener tu cuerpo en forma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario